martes, 17 de diciembre de 2013

A Matter of Time.



Daniela Zavala Palacios.

Un gusto simple el que nos une: la música.


La noticia tan esperada, el acontecimiento que pensamos no llegaría, o al menos, no en estos días, nos sorprendió.
De pronto ya teníamos fecha:  13 de diciembre…  de repente teníamos otra fecha y algo de desilusión a decir verdad, porque como bien lo comentaban por ahí, “son bien gandallas” y se dan el lujo de jugar con los días, el tiempo y nuestras emociones.

Los hermanos de los 3 apellidos, melómanos por excelencia, nos han arrastrado con ellos, en la locura y el amor por el sonido de las guitarras, el bajo, la batería… si bien la historia comenzó hace casi 20 años, soy reciente pero fiel admiradora de estos “gandallas”; comparto la locura del gusto desmedido por escuchar un buen escándalo a todo volumen. De pronto “los arrastrados” vamos siendo más.

Contamos el mes, las semanas, los días y las horas, nos llegó Diciembre  ¡por fin Diciembre!

Miércoles 11, repentino para algunos, muy esperado para otros, el Foro sol al 50%, pero la luna y las estrellas al 100… entonces aparece cualquiera, enfundado en un chal y en la cabeza, uno de esos sombreros enormes, de esos que los extranjeros creen que usamos para ir a la chamba del diario, a quien le importa, este “charrito” intenta probar el sonido de aquella emblemática guitarra, sí, la azul, y entonces todo comienza a ser real.  Minutos después se apagan las luces y comienza la fiesta: sí, eran ellos.

Bridge burning para empezar.
The pretender  para vocalizar
My hero y Learn to fly,  yo sabía que Brenda estaba por ahí.
Dut: White limo ¡finaly!... Debimos haber estado todos juntos en ese momento.  Arlandria y casi te vuelves canción.
These days, y no podía pedir nada más por el momento.
Un cover de Pink Floyd y a uno que otro se le hizo la noche.

18 años de espera, que más da 5 minutos de descanso.

La melena, la guitarra, una luz y miles de voces. 
Blackbird, un lujo.
Best of you, se caía el Foro.
Y entonces todos pedimos Everlong y quiénes son ellos para negarse.

3 horas después. Noche mágica, perfecta.

Viernes 13, nuestro día, el esperado. Cierre de año con broche de oro. Foro lleno y no hay más que decir porque todos sabemos lo que pasó, quien rompió la piñata.

My hero
Learn to fly
Arlandria
These days
Monkey Wrench
Best of you
Y podemos ir a casa.

2 horas y media después, nos quedamos con la promesa del “come back every year”. Con la emoción de una noche espectacular. Con la alegría de haberla vivido.

Nos alcanzó la intriga de nuestros familiares perdidos del otro lado del puente, la incertidumbre al otro lado de la línea, la siempre fallida recepción de la telefonía móvil.  Nos quedamos con las ganas de gritar y corear uno al lado del otro. Ya vendrá quien nos haga entrar a todos juntos por el famoso acceso D.

Gracias a los “gandallas” y al “héroe” de la noche.

Sólo era cuestión de tiempo…  sueño cumplido.



viernes, 13 de diciembre de 2013


Pasaba por aquí:  #PosMeSalto

Jair Valdés.

Desobediencia, resistencia, cambio.

Debo confesar que estaba escuchando a Luis Eduardo Aute, “Pasaba por aquí” y aunque resulte ridículo (La palabra por excelencia para este ensayo) me inspire a escribir.

Para un gran entendido de masa social, brincarse los torniquetes del metro, gritar en marchas y plantones, estar inconforme con las políticas públicas que perjudican a la Nación y su Sociedad puede resultar ridículo.

Si bien Sigmund Freud escribió excepcionalmente sobre el comportamiento harto distinto del sujeto en lo individual y su comportamiento en la masa, los actos en sí mismos de rebeldía no justifican del todo un cambio en la persona o de personalidad, uno llega o uno se suma porque realiza una evaluación contextual de las cosas.

A los medios de comunicación les gusta jugar y poner en evidencia a las personas que motivados por la masa asisten a manifestarse y llegan agresivos y empujando el micrófono preguntando la razón del porque se están manifestando, el resultado se proyecta en las pantallas con bombo y platillo, ese resultado es la respuesta de la persona con un “No sé”

Pero lo cierto es que si sabemos porque estamos ahí, tomando de nuevo en cuenta aspectos del psicoanálisis y de su padre Sigmund Freud, todo el tiempo o la mayor parte de este, el ser humano se proyecta y lanza mensajes en espera de respuesta, a veces enviamos mensajes o realizamos actos dejándonos llevar más por el corazón, si con razón, pero a veces con miedo a las respuestas, es así que un joven puede decirle en un “oye” a una mujer que la quiere, que la aprecia, que desea pasar tiempo con ella, pero cuando ella responde: “Mande” la mayor de las veces la respuesta es nada o no sé…

De igual forma en el sentido de la protesta social, actuamos porque sabemos que algo no funciona, no cuadra, no resulta, queremos cambios, paz, libertad y justicia, equidad e igualdad y ciertamente animados por la masa acudimos, a veces no tenemos conocimiento teórico de la justificación de un acto de resistencia o protesta, y es por eso que algunas personas responden no sé, o como respuesta programada por el miedo y la incertidumbre de equivocarse.

Para la sociedad resulta ridículo todo lo que no comprende, todo lo que se sale de su entendimiento, porque bueno a final de cuentas, se enseña en la familia, la religión, la escuela y la sociedad a no salir de lo normal, porque ya la vida es así, porque ya no se pueden hacer cambios.


Lo cierto es que muchas veces nos iniciamos así en muchas cosas, con miedo, tibios, con escudos, con los ojos vendados, decidimos tomar ese tercer camino desconocido del bosque, brincar esa ola rebelde del mar, mirar la luna y decirle cuanto la quieres, pero poco a poco uno se transforma, es un proceso individual, resultado de un largo proceso, precisamente por esto, no parece haber respuesta de la gente en las manifestaciones, actos de resistencia y desobediencia, pero si existen, si se dan, cada día una persona deja de comer carne por su salud, la del mundo y la de la economía, cada momento un joven se vuelve más crítico, cada día se enamoran más comprometidamente las personas, se levanta la bandera de la fidelidad y el respeto, se intercambia el producto y no se compra, se suman más a un #PosMeSalto, a un #132,  a un acto de fe, cada día, cada día, cada día…